Resumen:
En ambientes marinos bajo condiciones oligotróficas, el balance del flujo de energía y materia puede ser modificado por aportes de sustancias disueltas inorgánicas y orgánicas de origen antropogénico. La carencia de programas de monitoreo sobre el vertimiento de sustancias naturales o antropogénicas impide estimar con certeza el intercambio de energía y materia en estos ambientes. Por lo que es necesario adoptar y fomentar programas de monitoreo ambiental. Los programas de monitoreo que incluyen la concentración de nutrientes e isótopos estables de nitrógeno en pastos marinos y/o macroalgas, han sido utilizados eficientemente para determinar cuáles son las fuentes de estas sustancias de origen natural o antropogénico que llegan a los ambientes marinos tropicales y templados. Las concentraciones de nitrógeno inorgánico disuelto menores de 1 y la limitación del fósforo en ambientes costeros tropicales, contrasta con aquellos ambientes subtropicales donde estos constituyentes disueltos son pocas veces limitantes para la productividad marina. La variabilidad natural de la concentración de los nutrientes con el tiempo, debido a la intermitencia con que llegan a la zona costera por forzamiento natural (e.g., corrientes o viento) o por efecto antropogénico (descargas difusas y discontinuas), puede conducir a resultados diversos. Es por esto, que el uso de trazadores biológicos y su señal isotópica de nitrógeno puede ser utilizado para corroborar las fuentes de nitrógeno hacia el ambiente transicional marino. De esta forma, los modelos que son utilizados en el balance del flujo de energía y materia podrán ser parametrizados de manera más precisa, al contar con este tipo de monitoreo ambiental. Lo que conducirá a tomar mejores decisiones sobre el manejo de estos ambientes transicionales ya que repercuten en todos los ámbitos de la actividad humana sustentable.