Resumen:
La pesquería de abulón en México es administrada con cuotas, vedas y tallas mínimas de captura; de entre estas medidas de manejo, las cuotas son la más importante. La magnitud de las cuotas es estimada sobre la base de modelos poblacionales, específicamente con un modelo de biomasa dinámica. Este modelo es ajustado a datos de biomasa observada, usando la captura registrada como único insumo. La eficiencia del modelo es del 40%, es decir el 60% de la variación de los datos observados no es explicada por la captura. Ante esta situación surge la necesidad de mejorar el poder explicativo del modelo, integrando otras fuentes de captura que se sabe que existen, pero que no se han cuantificado: la captura ilegal, la captura no registrada y la captura no regulada. La consecución del proyecto SIP 20161881 permitió estimar la cantidad de abulón que es pescado de forma ilegal. Todas estas fuentes de captura se deben sumar a los registros oficiales para tener una medida más cercana de la cantidad de abulón que realmente se está extrayendo del medio natural. Una vez que la captura no regulada y no registrada se calculen e incorporen al modelo de evaluación, se espera que el ajuste entre la biomasa observada y la estimada mejore de manera significativa en términos estadísticos.