Resumen:
A nivel mundial, en las tres últimas décadas se ha observado un incremento en la frecuencia, abundancia y distribución geográfica de las microalgas productoras de toxinas (tóxicas) o dañinas. Bajo condiciones particulares, estas microalgas llegan a proliferar y formar florecimientos algales nocivos (FAN) y provocar daño a la fauna y flora circundante. Este tipo de eventos son comunes a lo largo de todo el año en el Golfo de California (Cortes-Altamirano et al., 1995; Gárate-Lizárraga et al., 2001; 2006; 2009.En La Bahía de la Paz, la aparición de estos florecimientos es cada vez mas frecuente y las especies responsables son los dinoflagelados Scrippsiella trochoidea, Noctiluca scintillans, Cochlodinium polykrikoides,Prorocentrum rhathymum y Gymnodinium catenatum;las diatomeas Rhizosolenia debyana, Chaetoceros debilis Pseudonitzschia pungens, Eucampia zodiacus y la rafidofícea Chattonella marina. Cada vez es mayor el número de especies de microalgas que se describen como formadoras de FAN. De estas especies, Cochlodinium polykrikoides, Chattonella ovata y Chattonella marina son ictiotóxicas (Gárate-Lizárraga et al., 2004a; Band-Schmidt et al., 2005). Asimismo, se han registrado especies productoras de toxinas paralíticas (PSP) tales como Gymnodinium catenatum, A. catenella y A. tamiyavanichii (Gárate-Lizárraga et al., 2004b); de ciaguatoxinas como Gambierdiscus toxicus (Sierra-Beltrán et al., 1998; Okolodkov y Gárate-Lizárraga, 2006) y diarreicas como Prorocentrum lima, Dinophysis fortii, D. acuminata, D. rapa, D. mitra, y D. tripos. (Gárate-Lizárraga et al., 2001; Heredia-Tapia et al., 2002; Okolodkov y Gárate-Lizárraga, 2006)