Resumen:
Las diferentes historias de vida de los elasmobranquios permitieron que durante los años 80´s, estos se convirtieran en un recurso pesquero accesible tanto para la flota artesanal como para las embarcaciones mayores. La disponibilidad y la falta de regulación permitió que la explotación comercial de estas especies fuera en aumento alcanzando sus niveles máximos alrededor del año 2000 para después disminuir gradualmente. Desafortunadamente, los parámetros de las historias de vida de los elasmobranquios por lo general les proveen de una baja productividad biológica en comparación con la de otros organismos marinos, por lo que suelen tener baja capacidad de recuperación ante alteraciones poblacionales. La asignación de edad y la estimación del crecimiento son parámetros esenciales para establecer medidas de control en el manejo de una especie ya sea para su explotación comercial o su conservación, debido a que nos arrojan parámetros importantes que podemos utilizar en modelos demográficos como longevidad y el tiempo que les lleva alcanzar tallas comerciales. Desde 1990, México ha sido uno de los países con mayores capturas de elasmobranquios a nivel mundial. Durante ese tiempo, con base en estudios previos se implementaron normas para regular la pesquería de tiburones y rayas tanto para su explotación comercial como conservación, sin embargo, es necesario continuar con estudios de biología básica debido a que son un recurso multiespecífico con diferentes historias de vida que varían de acuerdo con la región donde se desarrollan. Por lo anterior es importante determinar la edad y estimar el crecimiento de tiburones y rayas en las costas de Baja California Sur con el fin de complementar y actualizar la información básica para lograr un mejor manejo comercial y de conservación de estas especies.