Resumen:
La pesca de sardina en aguas mexicanas se inició en 1929 frente a las costas de Ensenada, coincidió en el periodo en el que la sardina monterrey dominó los desembarques en América del Norte. El colapso de la sardina monterrey en California, a partir de 1952, determinó la expansión de la pesquería mexicana hacia el sur sobre la costa de Baja California y Golfo de California. El análisis del colapso de sardina monterrey en California ha sugerido una combinación de efectos ambientales y antropogénicos. El hábitat tendió hacia temperaturas frías y se mantuvieron altas tasas de explotación. El descenso en biomasa de la sardina monterrey coincidió con el incremento de otras especies que comparten el ecosistema pelágico, macarela y anchoveta norteña entre otras. Las cuales dominaron durante los siguientes 25 años, hasta que el ambiente tendió hacia temperaturas cálidas, y la población de sardina monterrey inicio un repunte en biomasa. Una enseñanza que dejo el colapso de sardina a mediados del siglo 20 es monitorear en el ambiente y la composición especifica de la captura. La captura de peces pelágicos menores en la costa occidental de Baja California Sur desembarcada en los puertos de San Carlos y Adolfo López Mateos en Bahía Magdalena la integran cinco especies, siendo la sardina monterrey la especie principal. Los rendimientos para esta pesquería han mostrado incrementos constantes desde su inicio en 1981. Desde 10,000 en promedio durante su primera década, 30,000 en los 1990´s, 50,000 año/1 durante 2000-2017, y en los últimos años la captura ha superado las 80,000 año/1. En promedio, la importancia en la captura de la sardina monterrey ha sido 70%. Sin embargo, después del 2012 la importancia de la sardina monterrey ha promediado el 58%, no obstante incluir el récord histórico de 79,000 en 2018 que represento el 90% de la captura del total de especies.