La abundancia de las algas marinas y la gran variedad existente, son fuente de numerosos productos de diversa índole como: agar, alginatos, carragenanos, vitaminas, sales minerales, fertilizantes y las posibles propiedades farmacológicas y médicas de sus extractos (Huerta-Musquiz y Chávez-B, 1966; Diaz-Piferrer, 1979). Los principales compuestos bioactivos que son producidos por las algas marinas se encuentran conformados por una amplia gama de metabolitos secundarios, cada uno con una función específica dentro de su medio, como respuesta al hervivorismo. Estos metabolitos secundarios también están asociados a la disminución de epifitos, inhibiendo a los organismos competidores y patógenos microbianos. Por lo que el potencial antibacteriano de las algas se debe a su capacidad para sintetizar, entre otros, a los diterpenos en las algas verdes, terpenos halogenados en las algas rojas y metabolitos mixtos de origen terpeno-aromático en las algas pardas (Magallanes et al. 2003).Para este estudio se trabajó con el alga café Eisenia arborea recolectada en San Cristóbal, Baja California Sur. Se llevó a cabo una extracción con diferentes solventes en forma secuencial: hexano, cloruro de metileno, etanol y agua, con lo que se obtuvieron cuatro extractos crudos. Se evaluó la actividad antibacteriana de los extractos utilizando el método clásico de difusión de agar (2 mg disco^-1) (Bauer et al., 1966), contra Scherichia coli, Staphylococcus aureus, Streptococcus pyogenes, Vibrio parahemolyticus y Vibrio harveyi. Los resultados mostraron inhibición nula de los cuatro extractos contra Schrerichia coli, mientras que para las otras cuatro bacterias se obtuvo una respuesta positiva, siendo el extracto etanolico el de mejor respuesta inhibitoria. Se siguió el protocolo de fraccionamiento guiado por bioensayo. Hasta este momento se ha observado que las bacterias que han presentado un mayor halo de inhibición de 10 mm son Staphylococcus aureus y Streptococcus pyogenes. En base a lo trabajado hasta el momento se puede decir que el alga Eisenia arborea presenta amplias posibilidades de contener compuestos con actividad antimicrobiana, sin embargo, es imperante continuar con el estudio y llevar a cabo los ensayos faltantes para identificar el compuesto activo y saber si este es o no un compuesto existente en otros organismos o bien se trata de un compuesto nuevo el cual en un momento dado puede ser un fármaco alternativo.